Por: Christian Bracamonte
Comunicador Social - Docente
En nuestro país, el deporte sufre de varias carencias, por lo que es importante preparar al deportista desde niño, con herramientas necesarias para su desarrollo, tales como, una alimentación natural y equilibrada, una guía sicológica y preparación física para que pueda tener un crecimiento integral como deportista.
A través de la gestión deportiva se pueden llevar adelante distintos proyectos de responsabilidad social relacionados en todo el país.
Pero, es importante que los padres también estén involucrados durante todo el proceso, supervisando la parte psicológica y nutricional de sus hijos.
Gracias a estos proyectos -que deben ser liderados por profesionales de la gestión deportiva y responsabilidad social- también se puede fortalecer el manejo de las emociones, fortificar las habilidades sociales y prevalecer los valores del deportista.
Otro punto importante que podría ser aprovechado por la empresa privada y otras organizaciones, tiene que ver con poner en valor o remodelar instalaciones deportivas y buscar que esa inversión sea sostenible en el tiempo.
Esto traería beneficios no solo para los deportistas sino también para los propios vecinos porque incluirían servicios complementarios como servicios médicos, asistentes sociales, psicólogos entre otras especializaciones.
Por otro lado, se puede contribuir al desarrollo del fútbol femenino en todo el país, desde la etapa escolar, con el propósito, de que en un futuro, varias niñas puedan dedicarse a este deporte a nivel profesional, tal y como sucede en otros países en la que este deporte está más desarrollado.
Asimismo, se pueden llevar a cabo iniciativas en colegios públicos para el reclutamiento de talentos deportivos en diversas disciplinas.
Posteriormente, estos talentos podrían lograr su especialización, a través, de convenios entre empresas privadas, Ministerio de Educación, gobiernos regionales, IPD, federaciones entre otros.